El tema principal es la Escatologia. Vamos a ocuparnos del estudio de las cosas finales o ultimas que trata la Biblia y lo que sucederá al final del mundo como lo dijo Jesus. Apocalipsis nos cuenta sobre el final de La Muerte, El juicio, Profecía y el destino final del alma.

El Dia del Señor no es la Gran Tribulación

Algunos pre-tribucionalistas hacen diferencia entre "el día de Cristo", el "día del Señor Jesucristo" y "el día del Señor" y el "día de Dios" como si fueran días separados, se dice que el día de Cristo es el rapto y el día del Señor la manifestación siete años más tarde, sin embargo la Biblia no ofrece indicación alguna de que esto sea así. Si estudiamos detenidamente el próximo verso cuando Pablo hablaba acerca de aquel que estaba pecando y el cual debía ser disciplinado, Pablo dice: "el tal sea entregado a Satanás para destrucción de la carne, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor" (I Corintios 5:5). Aquel a quien Pablo se refiere era/es tan parte de la iglesia como lo somos nosotros ahora casi dos mil años después. Ese fue uno que durmió (murió) en el Señor y por lo tanto será resucitado en el arrebatamiento de la iglesia el cual según Pablo Será "el día del Señor" (al fin de la tribulación), no siete años antes del día del Señor.

Debemos recordar que de acuerdo a nuestro creencia Trinitaria existe solamente "un solo Dios" y "un Señor" no dos ni tres señores. Los pre-tribucionalistas no deben separar el "día de Dios", "día del Señor" y el "día de Cristo" ni el "día del Señor Jesús" como si fueran referencia separada al día del Padre como Señor y al día del Hijo como otro Señor. La frase "el día del Señor" es referida en el Antiguo Testamento como un día de juicio e ira de Jehová sobre el mundo entero (Joel 2:11, 3:15), pero debemos entender que el Jehová del Antiguo Testamento es el mismo Cristo del Nuevo Testamento. En la carta a los Tesalonicenses, Pablo enlaza el día de la venida de Cristo y el arrebatamiento (nuestra reunión con Cristo) al día del Señor demostrando así que el arrebatamiento ha de tomar lugar ese mismo día. Pedro también nos habla de que nosotros (Cristianos) esperamos "el día del Dios" (2 Pedro 3:12) en el cual los cielos y la tierra serán consumidos por fuego. Si comparamos la descripción que nos da Pedro del "día de Dios" en su segunda carta y la que ofrece respecto al "día del Señor" en su relato en el libro de Hechos (2:19-20) nos daremos cuenta que se refiere al mismo evento.

En vista de lo que hemos explicado arriba algunos pre-tribucionalistas enseñan que el día del Señor es la gran tribulación pero una vez más esta idea tampoco es bíblicamente sostenible. El día del Señor viene 'después' de la gran tribulación. Ya vimos que éste día es descrito por Pedro como un día el cual será 'introducido' con señales en el cielo cuando habrán "prodigios arriba en el cielo y señales abajo en la tierra: sangre, fuego y nubes de humo.El sol se convertirá en oscuridad y la luna en sangre antes que llegue el grande y esplendoroso día del Señor" (Hechos 2:19-20). Cuando estudiamos los eventos relacionados al tiempo de la gran tribulación en Mateo 24 leemos que los eventos descritos por Pedro en Hechos también son incluídos en el relato de Jesucristo y son puestos cronológicamente 'después' de la gran tribulación y no antes:

Mateo 24

29 E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas.30 Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria. 31 Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro.

Claramente vemos que como el día del Señor es 'precedido' por las señales en el sol y la luna y la tales señales ocurren 'después' de la gran tribulación, entonces por obligación la gran tribulación no es, ni incluye el día del Señor. La lectura de Mateo nos dice que después de las señales en el cielo "aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo" y "enviará a sus ángeles que junten sus escogidos de los cuatro vientos desde un extremo del cielo hasta el otro" lo cual es una referencia al arrebatamiento de 1 Tesalonicenses 4:15-17 y nuestra reunión con El en 2 Tesalonicenses 2:1.

EL FIN DEL MUNDO

Entendemos que el fin del mundo es uno solo. No pueden haber dos 'fines'; habrá solo un fin. Hablando del fin, deseo también añadir aquí un verso que me causó gran interés mientras preparaba un estudio sobre evangelismo. En Mateo 28:20 dice: "enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amen". Es imposible que Jesucristo esté con la iglesia que predica y enseña a los nuevos discípulos día por día 'hasta el fin del mundo' si estos se van al cielo siete años antes del fin del mundo. Simplemente no tiene lógica. ¿Cómo es posible que Cristo esté con aquellos que andan predicando y haciendo discípulos hasta el fin del mundo si estos se fueron al cielo 7 años antes del fin del mundo?

Una vez más vemos el siguiente verso: "el tal sea entregado a Satanás para la destrucción de la carne, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor". I Corintios 5:5. "el tal sea entregado a Satanás para la destrucción de la carne, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor". (I Corintios 5:5). La salvación de los creyentes ocurrirá o podríamos decir mejor, será consumada, en el día del Señor Jesús el cual será en su segunda venida:

La segunda venida del Señor es entonces el evento el cual los creyentes en Cristo esperamos con gran deseo, tal como lo hacían Pablo y Pedro, los demás apóstoles y los creyentes del tiempo de la Biblia. En ese día seremos resucitados, transformados y vivificados.

¿QUE ES LA RESURECCIÓN DE LOS MUERTOS?

Esta doctrina es de suma importancia si queremos saber con certidumbre cuando será el arrebatamiento de la iglesia ya que este evento y la resurrección de los muertos en Cristo tendrán lugar al mismo tiempo y el mismo día.

La resurrección de los muertos es la esperanza de los que mueren en Cristo. Jesucristo mismo nos prometió resucitarnos:

Juan 5:28-29

No os maravilléis de esto porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz; y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación.

Aquí Jesús nos introduce al concepto de la resurrección (aunque está enseñanza era la de los fariseos, Jesucristo la afirma), la cual ha de tomar parte en orden separados pero al momento de la venida de Cristo. Primero los que hicieron los bueno y después los que hicieron lo malo, la Biblia entonces nos enseña una resurrección general de buenos y malos el día de la Segunda Venida de Cristo.

DOS RESURECCIONES

En el libro de Apocalipsis vemos que la Biblia dice que habrá dos resurrecciones. La "primera resurrección" que es para vida, y es espiritual (Juan 11:25-26), nos libra de la condenación eterna de la segunda muerte. La primera resurrección ocurre al momento de la salvación (Efesios 2:6), y la "segunda resurrección" que es física (corporal), ocurre en la venida de Cristo tanto para justos como para injustos:

Apocalipsis 20:4-5.

Y vi tronos y sentados sobre ellos, los que recibieron la facultad de juzgar; y vi las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la Palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años. Pero los otros muertos no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años. Esta es la primera resurrección. Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección

En I Corintios 15:20-23, vemos el orden de la resurrección para vida (la primera):

20 Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho. 21 Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre la resurrección de los muertos. 22 Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados. 23 Pero cada uno a su debido orden: Cristo, las primicias, luego los que son de Cristo, en su venida.

Aquí claramente vemos el debido orden de los eventos de resurrección para vida, (Versículo 20 y 23) - Primero, Cristo resucitó de entre los muertos y es las primicias de los que durmieron; Segundo (Versículo 23) - los que son de Cristo, en su venida. Es importante notar que la palabra que se traduce "venida" en español es [parusía] en griego, que significa "Presencia Visible".

I Corintios 15 (literalmente)

20 Y ahora, Cristo ha sido levantado de los muertos -- los primeros frutos de aquellos que duermen es hecho --, 21 porque a través de hombre [es] la muerte, también, a través de hombre [es] el levantar otra vez de los muertos, 22 porque así como en Adán todos mueren, así también en Cristo todos serán hechos vivos, 23 y cada uno en su propio orden, un primer fruto Cristo, después aquellos quienes son de Cristo, en su presencia,

Como se podrá dar cuenta, Cristo fue hecho primicias de los que durmieron (murieron). Pablo nos indica entonces que la resurrección ocurre en dos etapas. Primero Cristo como 'primer fruto' (primicias) de entre los muertos y luego los que son de Cristo cuando él venga en su 'presencia' [parusía]. Cristo es la primera resurrección:

Juan 11:25-26

Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto?

Hechos 26:23

Que el Cristo había de padecer, y ser el primero de la resurrección de los muertos, para anunciar luz al pueblo y a los gentiles.

En el Evangelio de Juan Cristo dijo "el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá" y en el libro de Revelación dijo "Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección" . La frases operantes son "en mi" y "tiene parte". Estos son los que son "bienaventurados" y quienes "aunque estén físicamente muertos, siguen espiritualmente vivos. Los que están en Cristo por medio de la fe, ¡han tomado parte en la primera resurrección!

La garantía de que habrá una cosecha de muertos resucitados en el último día esta basada en que el primer fruto se levantó. La calidad de los primeros frutos daba señal o indicio de que tipo de cosecha se esperaba ese año. Como Cristo es la primera cosecha (primeros frutos-primicias), el finla de la cosecha será buena, está garantizada. Por lo tanto, los que son de Cristo, 'sin duda alguna' han de ser levantados "en su venida" (Parusía).

En el libro de Revelación 14:4 se dice que los 144,000 son las primicias, estos son un número simbólico que representa todos los salvados desde el principio del mundo hasta el final, ellos componen el Israel de Dios. En el AT las primicias de la cosecha eran siempre para Dios, el resto para consumo del pueblo. La Iglesia es de y para Dios (Éxodo 23:19; 34:22,26), y por eso es llamada primicias. Los 144,000 representan a los salvados del pueblo de Dios en todos los tiempos (el Israel escogido) al cual pertenecen todos los que permanecieron en fe desde el Antiguo Testamento y no fueron desgajados por su incredulidad (Romanos 11) y los creyentes en Cristo del Nuevo Pacto quienes comenzaron a ser recogidos el día de Pentecostés (fiesta de las semanas o de los primeros frutos) que marcaba la cosecha de las primicias, esa es la Iglesia, el Israel espiritual. Estos son de Cristo y serán resucitados "en su venida" (Parusía).

El verso 24 sigue: "y entonces el fin Claramente vemos que la resurrección tomará lugar el día de la 'venida (parusía = presencia visible) de Cristo'. Y seguidamente será el fin del mundo presente, tal como lo dijo Pedro, el mundo "...pasara con grande estruendo... siendo quemado".